América Móvil, Alfa, Grupo México, Grupo Bal, BBVA Bancomer, Volkswagen y Walmart de México, forman parte del listado de las 500 Empresas más importantes de México, elaborado por la revista Expansión. Los siete grupos, en conjunto y tomando en cuenta algunas de sus subsidiarias y/o concesionarias, tuvieron 305 contratos en los 14 meses de referencia del ranking (enero de 2018-febrero de 2019), por un total de 2 mil millones de pesos. 83% de los contratos fueron dados en adjudicación directa.

Como proveedoras del gobierno, las compañías tienen más poder y presencia cada vez. Las ventas totales de los siete grupos empresariales fueron por 2,898 millones de pesos en 2018, según lo que reporta Expansión. Es decir, si fueran un sólo grupo comercial, casi el 100% de sus ventas habrían sido por contratos con el gobierno.

Expansión también mide la integridad de las empresas, para lo cual utiliza el Ranking de Integridad Corporativa 500 (IC500), realizado por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad y Transparencia Mexicana. Dicho ranking “constata la existencia y evalúa la calidad de las políticas anticorrupción de las 500 empresas más grandes con presencia en México según Expansión”. Sin embargo, el ranking no mide el cumplimiento de los compromisos de las empresas, pues sólo revisa la información pública de las mismas. No toma en cuenta, por ejemplo, reportajes que revelan casos de corrupción o irresponsabilidad social.

Resaltan casos como el de Grupo México al cual sus múltiples desastres ambientales no colocan al final en la puntuación que mide la “integridad corporativa”; el de Grupo Bal, que con la minería, provocó que la comunidad de San Julián, madereros por tradición, se quedaran sin oficio; o BBVA Bancomer, que tuvo uno de los puntajes más altos dentro del ranking de integridad corporativa a pesar de haber sido multada en 2018 por manipular el mercado de bonos.

La de Slim

América Móvil, de Carlos Slim, el hombre más rico de México, ocupa el segundo lugar, después de la empresa productiva del estado Petróleos Mexicanos, en el ranking de las 500 más importantes. Con ventas netas de 1,038 millones de pesos en 2018, la firma de telecomunicaciones, a través de sus subsidiarias Teléfonos de México y Radiomóvil Dipsa (Telcel), ganó 176 contratos ese año, por 198,104,837.13 pesos. Sólo 19 contratos fueron dados en invitación a cuando menos tres o licitación abierta.

Es decir, 19% de las ventas del grupo fueron pagadas con dinero público para adquirir servicios por parte del gobierno. Hasta febrero de 2019, periodo tomado por el IC500, la empresa ganó 35 contratos más. Mientras que según el IC500, su puntaje en integridad corporativa es de 86.3 y cuatro estrellas y media.

El monopolio fue por años la práctica favorita de Slim y sus empresas de telecomunicaciones, hasta que se le nombró actor preponderante y se le obligó a por lo menos prestar su infraestructura a otros competidores. Sin embargo, las consecuencias de su monopolio todavía representan pérdidas para la empresa y por años para los usuarios.

En abril de 2018 el Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) resolvió sancionar a América Móvil y Telcel con 96.8 millones de pesos por celebrar convenios de exclusividad con Blue Label México (BLM), que entre marzo de 2012 y agosto de 2014 impedían comercializar tiempo aire de los competidores de Telcel en su servicio de telefonía móvil ¹.

Las mineras

Grupo México y Grupo Bal, propiedad de Germán Larrea y Alberto Bailleres respectivamente, dos de los hombres más ricos de México, ocupan los lugares 13 y 14 del listado de las 500 Empresas más importantes. Aparecen como holdings.

La primera con ventas en 2018 por 201 millones de pesos, obtuvo sólo dos contratos con el gobierno ese mismo año, a través de su subsidiaria Ferrosur, S.A. de C.V., por 2.7 millones de pesos. Ambos fueron por adjudicación directa. Ferrosur y Ferromex, la otra empresa ferroviaria de Grupo México, suman control de casi 10,000 km de vías ferreas.

Grupo Bal como holding tuvo ventas por 200 millones de pesos y 10 contratos entre el 1 de enero de 2018 y febrero de 2019 por 157.9 millones de pesos, a través de sus filiales GNP Grupo Nacional Provincial y Metalúrgica Met-Mex Peñoles.

Sin embargo, las mayores controversias de Grupo México y Grupo Bal, se encuentran en sus negocios mineros. Por parte de Grupo Bal, tanto Industrias Peñoles como Fresnillo PLC, ambas subsidiarias mineras de la firma de Bailleres, ocupan los lugares 45 y 98 en el listado de Expansión, pero se podrían contabilizar en conjunto como grupo.

Hasta 2018 entre Grupo México, con sus filiales Buenavista del Cobre, Mexicana de Cobre y Minera Pilares, y Grupo Bal con las filiales de Industrias Peñoles y Fresnillo PLC, Compañía Fresnillo, Compañía Minera La Parreña, Desarrollos Mineros El Águila, Desarrollos Mineros Parreña, Exploraciones Mineras Parreña, Exploraciones Mineras Peñoles, Flobarco, Minera Madero, Minera Opodepe y Minera Pecobre, sumaban 205 concesiones mineras vigentes en un territorio de 247,899.40 hectáreas, según información de la Secretaría de Economía obtenida vía transparencia.

En cuanto a integridad corporativa, Grupo México tiene 80.4 puntos y cuatro estrellas y media, y Grupo Bal ni puntaje ni estrellas, pero Industrias Peñoles tiene 94.1 puntos y Fresnillo tiene 98 puntos.

Las calificaciones parecen olvidar que Grupo México no ha remediado efectivamente las afectaciones a siete municipios en Sonora provocadas por el derrame de 40 millones de litros de lixiviado de cobre en los ríos Sonora y Bacanuchi hace cinco años. En 2018 la Suprema Corte de Justicia dio un fallo positivo a un amparo que los Comités de Cuenca de Río Sonora, agrupación de personas afectadas, presentaron para suspender la ampliación de la mina Buenavista del Cobre, misma del derrame, hasta que no se respetara su derecho a la participación.

Toda esa información parece no ser tenida en cuenta para el ranking de las 500 más importantes porque lo que reporta Grupo México en sus informes de sustentabilidad dista de la realidad.

El banco multado que sigue siendo contratista

BBVA Bancomer comenzó con su cambio de identidad² este año, para dejar atrás a “Bancomer” y presentarse sólo como “BBVA”, después de que en noviembre de 2018 fuera multado junto con otros cuatro bancos, ocho operadores y dos agentes de bolsa por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) por incrementar los volúmenes de intermediación de bonos³.

La multa no desapareció a BBVA Bancomer como una de las empresas más importantes de México para Expansión y el IC500. En el periodo que mide el listado, el banco -que hoy enfrenta otra posible multa por el mismo caso de la manipulación de bonos, pero ahora por parte de la Cofece⁴, recibió sólo un contrato con la Compañía Mexicana de Exploraciones, S.A. de C.V., por casi 4 millones de pesos.

El contrato fue dado en adjudicación directa y fue para proveer el “servicio para revisión, análisis y evaluación de la situación financiera” de la empresa de participación mayoritaria del estado durante cuatro meses.

Sorprendentemente, el banco es una de las empresas con mejor puntaje de integridad según el IC500, con 98 puntos, junto con Grupo Bimbo y Fresnillo PLC.

La del norte

Alfa, presidida por Armando Garza Sada, es una de las más grandes en el listado de Expansión y que además es contratista del gobierno. En 2018 tuvo ventas por 366 millones de pesos, ocupando el puesto 8 y con una calificación de 70.6 en integridad corporativa y cuatro estrellas.

La firma originaria de Nuevo León aparece como holding en el ranking, pues tiene como subsidiarias a Sigma Alimentos, Alpek, Nemak, Axtel y Newpek. De todas ellas, sólo Axtel tuvo contratos con el gobierno en el último año.

Por sí misma Axtel ocupa el lugar 236 de las 500 Empresas más importantes de México. Con casi 13 millones de pesos en ventas en 2018 y 72.5 como puntaje de integridad corporativa, la empresa de telecomunicaciones firmó 77 contratos con el gobierno mexicano, 56 de los cuales fueron en adjudicación directa, por 1,618 millones de pesos hasta febrero de 2019. El contrato más grande en ese periodo fue con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para proveer el “servicio de conducción de señales y red digital integrada”, con una vigencia hasta 2020 y en consorcio con la empresa Reto Industrial, S.A. de C.V.

La de autoservicio y la concesionaria

Para el IC500 y Expansión, Walmart de México, filial de la tienda de autoservicio Walmart, dejó atrás el caso de corrupción y sobornos en el país, descubierto en 2012 por la periodista Alejandra Xanic. Ocupa el tercer lugar del listado, y obtuvo 88.2 puntos en su integridad corporativa.

Entre enero de 2018 y febrero de 2019, la empresa, a través de su tienda, Nueva Walmart de México, tuvo dos contratos en adjudicación directa por 72,697.59 pesos, por la venta de papel bond a la Administración Portuaria Integral de Lázaro Cárdenas, y de alimentos al Centro de Investigación Científica de Yucatán.

Mientras que Volkswagen se benefició indirectamente a través su concesionaria Distribuidora Volkswagen del Bajío, S.A. de C.V.⁵, que tuvo dos contratos, ambos en adjudicación directa, en el periodo que midió el ranking, por 77 mil pesos. Los contratos fueron para dar mantenimiento preventivo y correctivo a vehículos Volkswagen y los compradores fueron la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuito y Liconsa, S.A. de C.V. Su puntaje en el IC500 fue 78.4.

Si bien es importante medir el compromiso social e integridad de las empresas a través de sus promesas y resultados plasmados en sus propias comunicaciones, mientras no se tome en cuenta la realidad de cómo operan y afectan las compañías a sus entornos, no se tendrá un panorama completo de qué tan cierto es el compromiso que dicen tener.

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