109,524,886.53 pesos en publicidad oficial, fue el gasto realizado por el gobierno de México en la administración de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en los primeros nueve meses de 2019. El gobierno ha cumplido con la promesa de una fuerte reducción al gasto¹, aunque lo sigue ejerciendo de manera discrecional como ocurría en sexenios pasados. Es decir, no son claros los motivos por los que se entrega dinero público a las agencias de comunicación y empresas de medios.

Los polémicos Ramos 23, de Provisiones Salariales y Económicas, y 33, de Aportaciones Federales para Entidades Federativas, también son un problema para rastrear el dinero con el que se premia a los medios de comunicación. Estos fondos suelen ejercerse con mucha más discreción que otros programas, pues la mayoría de ellos no cuenta con reglas de operación sino con lineamientos generales.

En específico, la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, estipula que la fiscalización de las aportaciones federales a estos ramos (que gracias a su facultad de reasignación en ocasiones es utilizada para pagar servicios de publicidad) es llevada a cabo por órganos de auditoría estatales y municipales, que rinden cuentas ante cada congreso local². Debido a esto, los fondos del R23 y 33 son conocidos como la caja negra del presupuesto.

Sobre el recorte presupuestal, la académica especialista en análisis mediático y activista de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (AMEDI) Rosalía Orozco Murillo opina que aunque eran necesarios, “con López Obrador sigue habiendo un fuerte golpe al derecho de los ciudadanos para estar bien informados”, debido a que la disminución del presupuesto sin política pública clara genera despidos masivos en los medios y no mejora la calidad de la información.

Tercer trimestre de gran inversión publicitaria

El 88.9% del gasto se realizó durante los últimos tres meses de gasto reportado (julio, agosto y septiembre de 2019) es decir, de los más de 109 millones de pesos del total gastado, 97,450,501.84 pesos se entregaron de última hora. El gasto más recurrente fue el de publicidad en medios impresos editados en la Ciudad de México, seguido de la pauta en televisión, Internet en tercer lugar y la radio en cuarto.

El diario impreso La Jornada recibió, de enero a septiembre, 34,507,263 pesos en 471 contratos. De éstos, 176 fueron por publicidad en la edición impresa y 295 por publicidad en Internet. El Instituto Politécnico Nacional (IPN), la Secretaría de Marina (SEMAR) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) fueron quienes más les pagaron.

Las dependencias que más gastaron en publicidad oficial fueron la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), los Pronósticos para la Asistencia Pública, la Secretaría de Marina (SEMAR), la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), y en quinto lugar, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Y los medios que más pauta pagada recibieron fueron La Jornada, TV Azteca y Televisa.

Los cinco contratos por publicidad oficial más onerosos del primer año de la gestión de Andrés Manuel López Obrador, también fueron a favor de las empresas La Jornada, Grupo Televisa y TV Azteca, a través de su subsidiaria Estudios Azteca, S.A. de C.V., respectivamente.

La publicidad a Televisa y TV Azteca

Entre Televisa y TV Azteca se suma el 12.08% del total que podemos fiscalizar de publicidad oficial, ingresando 6,256,984.47 el medio de Azcárraga (90,517.24 para Editorial Televisa, S.A. de C.V. y 6,166,467.23 para Grupo Televisa, S.A.B.) y 6,983,594.56 el medio de Salinas Pliego.

El gobierno no sólo ha favorecido a estos empresarios con la publicidad. A través de Banco Azteca, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador entregó, sin licitación alguna, la emisión y manejo de las denominadas “Tarjetas de Bienestar”, en las que se han estado depositando los apoyos a los beneficiarios de programas sociales como Jóvenes Construyendo al Futuro, y que para el 2020 ha obtenido fondos por 25,000 millones de pesos³.

Otras empresas propiedad de Salinas Pliego son Azteca Comunicaciones Colombia, S.A.S., TV Azteca, S.A.B. de C.V., Atlético Morelia, S.A de C.V., Azteca International Corporation, Club de Futbol Rojinegros, S.A. de C.V., Todito.com, S.A. de C.V., Grupo Elektra y Banco Azteca.

En tanto, a Grupo Televisa de los Azcárraga, el primer guiño del obradorismo ocurrió durante su discurso final de campaña cuando se tomó la decisión de que, en lugar de aparecer en el Zócalo Capitalino como muchos seguidores esperaban, se realizara un evento a puerta cerrada en el Estadio Azteca, propiedad de Grupo Televisa⁴. Aquel gasto ascendió a 1.3 mdp⁵, y a pesar ello, le fueron entregados más de seis millones de pesos en seis contratos de publicidad oficial en2019.

Televisa, durante años el medio de comunicación más rentable del país, está configurada por más de 50 razones sociales entre las que destacan: Grupo Televisa, S.A.B., Apuestas Internacionales, S.A. de C.V., Barra Deportiva, S.A. de C.V., Cablemás, S.A. de C.V., Cablevisión Red, S.A. de C.V., Editorial Clío, Libros y Videos, S.A. de C.V, Compañía Cervecera Del Trópico, S.A. De C.V., Innova, S. de R.L. de C.V., Iusacell PCS, S.A. de C.V., Cadena Radiodifusora Mexicana, S.A. de C.V., Servicios Telum, S.A. de C.V., entre otras. Y su principal negocio es el de las concesiones de bandas y radio espectros.

La alianza histórica entre las dos televisoras

“Grupo Televisa (“GTV”) y Televisión Azteca (“TVA”) en su conjunto concentran, directa o indirectamente, 95 por ciento de las concesiones, 96 por ciento de la audiencia y 99 por ciento de los ingresos por publicidad, asociados con la televisión abierta comercial”⁶, por esta razón en 2013, el Instituto Federal de Telecomunicaciones, publicó en el Diario Oficial de la Federación un programa de licitación de frecuencias en el que dejaron fuera a estas grandes empresas.

Las dos televisoras, que compitieron por la audiencia de los mexicanos durante 2010/2011, son aliados en el campo empresarial desde la resolución de la polémica licitación de la banda 1.7 Ghz, conocida como “la licitación 21”.

Lo que en un momento pareció un contrato favorable a la alianza Televisa-Nextel, fue impugnado en 78 ocasiones por Salinas Pliego con TV Azteca. Pero lo que suponía una riña entre las dos televisoras más grandes del país, acabó con una alianza para evitar que Carlos Slim entrara en el mercado y con el gobierno limitando su expansión para evitar denuncias por monopolio.

Por estos motivos, la declaración de López Obrador realizada el 18 de abril donde menciona que: “No se premiará (a los medios de comunicación) con publicidad oficial”, es, para Orozco Murillo, solamente una frase política que está incompleta⁷. Aunque sí asegura que existe un cambio en la asignación, también comenta que no es muy claro.

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