Hoy, en #EmpresasConTache, sumamos a #Noverite, un call center que da servicio a HSBC, y que ante la #COVID19 retuvo pagos, cambió esquemas de trabajo y no mandó a toda su plantilla a trabajar en casa. Te contamos:
Los abusos comenzaron antes de la pandemia y se intensificaron con la misma, según relataron fuentes anónimas. Los empleados venden tarjetas de HSBC y reciben un sueldo base y comisiones. En enero sucedió el primer atraso de pago semanal.
“Nos dijeron que HSBC pagaba cada 15 días las tarjetas vendidas y que a fin de año el banco no paga a sus empleados, así que en diciembre no pagaron a #Noverite y en enero no tenían cómo pagar lo vendido de ese mes”, dice una de las fuentes.
#Noverite pagó lo atrasado en febrero, pero en la 3a semana dejó de pagar de nuevo; igual las siguientes 3 semanas. Entre marzo y abril, las comisiones también cambiaron: ya no se pagaba cada venta a $275, sino a $175, y a partir de la venta de 10 tarjetas, ya no de 5.
Según una fuente, al inicio de la pandemia se les tomaba la temperatura diario y se les daba gel, pero seguían sentados a menos de 1 metro de distancia. Luego les dieron toallas desinfectantes para al poco tiempo cambiarlas por tiras de tela mojadas en cloro.
En la fase 2 de la pandemia, decretada el 24 de marzo, #Noverite anunció que se les pagaría sueldo base en abril, pero que las comisiones se acumularían para ser pagadas en mayo. Aún así, en abril la empresa retuvo pagos de sueldo cada dos semanas.
Ese mismo día, #Noverite publicó en Facebook un “Boletín informativo”, diciendo que debido a las medidas tomadas por la empresa, se ha logrado mantener la salud “y los trabajos de todo el personal”, y que seguiría operando con normalidad.
Con la #COVID19, la empresa mandó a un grupo piloto a hacer home-office, y se le condicionó su estancia en casa a estar conectado más horas sin más pago. Aquellas personas que no podían o querían trabajar más tiempo debían regresar al call center.
Los atrasos en los pagos seguían. “Pedimos una fecha para el pago y que no volviera a pasar. Nos dijeron que no podían comprometerse con que no volvería a pasar porque dependían del pago del banco. Dijeron ‘es lo que hay y si no les gusta, ahí está la puerta’”.
Cuando finalmente pagaron, lo hicieron en efectivo, supuestamente porque sería más fácil a esperar a que HSBC les depositara y a hacer las transferencias. Los empleados pidieron pruebas de que HSBC estaba incumpliendo con los pagos. #Noverite no entregó nada.
El 20 de abril, #Noverite despidió a 20 personas, usando como excusa la “baja productividad” de los empleados. Varios de los despedidos se habían quejado por la falta de pago y habían hecho huelga en días anteriores.
Ante los despidos, la empresa quería dar finiquito y no liquidación. A pesar de que algunos empleados firmaron el documento de baja, y que ya han pasado semanas, #Noverite no les ha pagado esa suma ni comisiones atrasadas. Los afectados ya analizan una denuncia legal.
En redes sociales se puede encontrar también a usuarios que se han quejado de no recibir su finiquito y de que el call center sigue operando sin las medidas de protección necesarias ante la #COVID19.
Después del despido, #Noverite, que asegura tener a más de 2 mil empleados en CDMX, Guadalajara, Texas y Colombia, comunicó a los empleados que ya no pagaría el sueldo base sino sólo las comisiones, según las fuentes consultadas.
Los líderes de #Noverite fueron identificados por las fuentes como los hermanos Felipe, Claudia y Adriana Martínez Vaca, quienes en varias ocasiones dieron las instrucciones a los empleados. Claudia aparece en su LinkedIn como directora de RH hasta 2019.
HSBC nos respondió que «una vez establecido un contrato, HSBC México cumple en tiempo y forma con los pagos a proveedores». #Noverite y los hermanos Martínez Vaca no respondieron a nuestras solicitudes de entrevista.